martes, 3 de junio de 2008

Propaganda y votos

El Partido Socialista Obrero Español es actualmente el partido que gobierna en este país. Posee una mayoría simple que le permite hacerlo con relativa comodidad. En 2004 y tras la nefasta actuación del PP durante los atentados del 11-M retornó a Moncloa tras ocho años en la oposición. Muchas medidas se pusieron entonces en marcha, leyes de igualdad, de dependencia, matrimonio homosexual, de tráfico etc. Pero es en este nueva legislatura es cuando me he dado cuenta de que el PSOE se esta convirtiendo en el partido de la propaganda. Cuando en la cadena Cuatro se entrevistó, al poco de ganar las elecciones del 2008, a Bibiana Aido, Ministra de Igualdad, pensé, en mi joven ignorancia, que este nuevo Ministerio se encargaría de tratar asuntos como la diferencia de salarios entre los inmigrantes y los españoles o la difícil situación de muchas familias que no pueden situarse al mismo nivel que otras, la igualdad entre desiguales solo favorece al más fuerte. Cuan sorprendido me vi cuando de su boca solo salían promesas de igualdad entre mujeres y hombres, y no digo que no deba ser así ni mucho menos, pero estaba claro que ese era el Ministerio de la Propaganda y nada más. Votos y votos.

También mi joven mente se pregunta ¿por qué si la situación económica aún es solventable antes de que empeore mi Gobierno socialista esta tan parado a primera vista?. La solución puede ser bien sencilla, porque no queda ni rastro del superávit que se ha desperdiciado en leyes de propaganda. Las ayudas directas vivienda son una verdadera chorrada ya que lo que provocan directamente es el aumento del precio de los alquileres, y les diré más, suben exactamente 210 euros, curioso ¿no creen?. Solbes esta convencido de que la situación se reajustará, cosa que es probable, pero no nos podemos fiar de algo tan cambiante como es la economía mundial.

De otras cosas también me sorprendo, poco han subido los precios teniendo en cuenta a cuanto asciende el barril de brent referente en Europa.

Si se quiere atajar esta “desaceleración” lo indudable es que no se puede tratar la inflación y el paro al mismo tiempo. Felipe González y Aznar lo sabían, se concentraron en esta primera y el paro bajo consecuentemente. Pero hicieron algo. Felipe lo primero fue reconocer que había crisis, no estamos en la misma situación ni de lejos, pero por lo menos afrontaron los problemas mas de cara.

Las crisis económicas de los Estados del Bienestar son las crisis de las clases medias, esas clases medias de las hipotecas, de los veranos en las capitales y de mirar cada vez más el carro de la compra son las que mantienen este país. A ellos deberían dedicarse los mayores esfuerzos, a aquellos a los que en su momento les dijimos que se hipotecasen a interés variable. Ellos son los que soportan todo el peso de la economía del país, la clase trabajadora del lenguaje clásico socialista que no deberíamos olvidar tan deprisa. Así que las medidas para mejorar su situación no deberían hacerse esperar más.

Dejar hacer oídos sordos al desastroso estado de la sanidad pública también estaría bien. Que en un Gobierno que alardea tanto de ser socialdemócrata las listas de espera medias sean de tres meses es una vergüenza. Las notas de corte en las facultades de medicina para entrar son desmesuradas teniendo en cuenta la falta de médicos que hay. Cada vez más gente recurre a la sanidad privada por que los hospitales están copados de pacientes. Esto se debe en gran parte a la política de inmigración demasiado permisiva que ha rejuvenecido nuestra demografía y asegurado mi pensión, pero que ha colapsado la Seguridad Social.

Soy socialista convencido pero en algunos momentos de la campaña electoral pensé sinceramente que Rajoy, con sus inmensos defectos, sería capaz de al menos tratar los problemas del día a día, imagínense lo que supuso para mí. Hoy por hoy he comprobado que ninguno de los dos esta capacitado para hacerlo y esto es debido a que ganar se ha convertido en la única meta y no los españoles

sábado, 10 de mayo de 2008

Dios y el dilema de la película "Contact"

“Contact” es una película de ciencia ficción dirigida por Robert Zemeckis basada en la novela homónima de Carl Sagan. Su protagonista, Ellie Arroway, es una brillante científica que trabaja en el proyecto SETI. Durante uno de sus rastreos por el universo detecta una señal extraterrestre que resultan ser los planos para la construcción de una maquina. Dicha maquina es un vehículo para viajar a otros mundos. Todas las naciones del mundo participan en su construcción y entre ellas decidirán quien será su piloto. He aquí donde se plantea el dilema. Aparte de las aptitudes intelectuales otro factor se tiene en cuenta para la selección del representante: si es creyente o no.

En un mundo donde el 90% de la población cree en algún tipo de deidad ¿deberíamos enviar a alguien creyente o no creyente como nuestro representante? La ciencia siempre a estado enfrentada a las religiones al basar el mundo, su formación y destino en un ente abstracto divino llamado Dios. Sin embargo poco a poco el pensamiento racional ha ido desbancando las primigenias explicaciones de la realidad que las religiones dieron. Además ha sido ella quién ha hecho posible los viajes espaciales y la exploración espacial además de otros innumerables logros.

Sin embargo bien es cierto que en ese primer contacto debería estar presente alguien que nos pudiera representar del mejor modo posible a la mayoría de la población mundial, y la como he dicho buena parte de ella es creyente.

Esto trae consigo otro dilema, si se duda si enviar a alguien que crea en Dios o no, en conjunto el mundo esta dudando de la existencia de Dios puesto que si de verdad estuviéramos convencidos de su existencia hubieran enviado a un creyente.

Que podemos sacar de esta inútil reflexión, pues que la respuesta de que si Dios existe seguirá sin responderse, que el mundo en el fondo es un poco escéptico y que nadie cree al 100% en la existencia de ese ser llamado Dios.

Por cierto en la película un integrista religioso vuela la nave con el piloto creyente (irónico ¿no creen?) y la candidata atea logra con relativo éxito culminar el viaje.

viernes, 9 de mayo de 2008

"...Y bajos los adoquines no había arena de playa"

De los incidentes del “Mayo francés” y todas sus consecuencias mucho se ha escrito, no se yo quien arroje nueva luz sobre los acontecimientos. Pero para mis contemporaneos, según el lenguaje orteguiano, el mayo es algo totalmente desconocido. Vamos a descubrírselo ahora que se cumplen cuarenta años del comienzo del moviemiento.

A pesar que desde el fin de la II Guerra Mundial la situación económica en Francia había mejorado notablemente, los sueldos de muchos trabajadores continuaban siendo ridículos, a los licenciados les resultaba muy difícil encontrar trabajo y las cargas policiales contra las protestas estudiantiles eran constantes.

El viernes 3 de mayo un gran número de estudiantes se reunió en la Sorbona, las detenciones solo sirvieron para caldear aún más los ánimos. El lunes 6 los ochos detenidos en la Soborna compadecieron ante el Comité de Disciplina de la Universidad. Cuando comenzaron las manifestaciones la policía atacó salvajemente y se formaron auténticas batallas campales por París.

A partir de entonces la revuelta estudiantil fue imparable, 30000 estudiantes marcharon a la Sorbona y el gobierno de De Gaulle respondió con suma dureza. El lunes 13 se produce una huelga general secundada por 9 millones de trabajadores, el país queda paralizado. Las huelgas, manifestaciones y detenciones continúan y el día 30 De Gaulle aparece en televisión informando que en 40 días se celebrarán elecciones.

A finales de junio todo ha terminado y De Gaulle sale reelegido y aun mas reforzado con el 60% de los votos.

En cuanto a las causas del fracaso del mayo se puede aludir a la falta de coordinación táctica e ideológica. El Partido Comunista Francés contaba con que su poder se vería incrementado en las elecciones y no quería que las revueltas continuasen. El mayo se diluyó tan rápido como había surgido.

Las consecuencias también fueron ambiguas. Los partidos comunistas europeos se alejaron de Moscú creándose el eurocomunismo. La palabra revolución renació y se consiguieron importantes mejoras salariales.

Para España supuso algo distinto. Los movimientos de oposición resurgieron con fuerza, se había tomado conciencia, recurriendo al ejemplo francés, de que se podía cambiar la sociedad. El mayo caló mucho en España, el régimen sufrió una escala de violencia sin precedentes que continuaría hasta el final de la vida de su líder. Sin el mayo quizás la lucha antifranquista de finales de los 60 y los 70 no hubiera sido tan intensa. Desde aquella primavera el régimen no conseguiría nunca más la adhesión total de una población que clamaba por el cambio.

miércoles, 7 de mayo de 2008

Salvador Puig Antich (IV)

Tras la muerte de Carrero Blanco todo cambió, el régimen clamaba venganza y Salvador fue condenado a muerte, aunque solo por una de dos penas que se pedían. Ahora era cuestión de tiempo, el Consejo de Ministros se reunía los viernes y no tardarían en firmar el enterado. Tras ratificar la sentencia la familia de Salvador disponía de doce horas para tratar de evitar que se cumpliera. Por toda Europa se organizaron manifestaciones y el Papa llegó a llamar en persona a Franco para que conmutara la pena, pero Franco dio orden de que no se le despertara. Los intentos desesperados de la familia fueron en vano, Puig su última noche en la celda 443 de la cárcel Modelo de Barcelona acompañado de sus hermanas.

A las 9:00 de la mañana Salvador es llevado a un sótano donde a duras penas logrará mantener la compostura al comprobar que lo iban a ajusticiar con garrote vil. Los más jóvenes quizás no sepan que es esto del garrote. Se trata de una argollar que se coloca alrededor del reo y se introduce un tornillo por la nuca apretándolo hasta que el condenado muere asfixiado o se le rompe el cuello, una técnica sin duda inhumana que aun se practicaba en España en los setenta. El día 2 de marzo de 1974 moría Salvador Puig Antich, contaba solo con 25 años. A su entierro solo acudieron familiares y amigos cercanos pero al cementerio acudieron miles de personas, la policía actuó como de costumbre con golpes y detenciones, se oficiaron misas por toda Barcelona y la repulsa por su muerte fue enorme.

Sin embargo no debemos glorificarlo ni convertirlo en mártir, estoy seguro de que él no lo hubiera querido así. Tenemos que tener a Salvador como una de las muchas víctimas del régimen franquista, un ejemplo de lo que vivió la sociedad de la época. Tampoco pretendo levantar ampollas, el espíritu de la transición nos ha llevado a un país de libertades y derechos, pero tenemos que recordar que esto nos ha costado un precio enorme y de vez en cuando no esta mal recordar a aquellos que lucharon y murieron por la democracia hace mas de treinta años.